Los arqueólogos de la Universidad Austral de Chile UACh, Simón Sierralta y Constanza Cortés, viajaron a Nueva York en septiembre de 2023 para revisar una colección arqueológica sobre Chiloé en el Museo Americano de Historia Natural, la cual es poco conocida en Chile.
El viaje se enmarca en el “Colonialismo insular en los confines australes de América: interculturalidad, impacto y definición arqueológica de Chiloé y su jurisdicción (siglos XVI-XVIII)”, financiado por ANID y liderado por el Dr. Simón Urbina, arqueólogo de la Universidad Austral de Chile en la Sede Puerto Montt.
La colección arqueológica sobre Chiloé fue recolectada entre 1935 y 1936 por los estadounidenses Junius y Margaret Bird. Esta colección incluye artefactos de piedra, moluscos, huesos y cerámica indígena y europea, cruciales para entender las interacciones culturales durante el periodo Alfarero Tardío y la Colonia.
La expedición de los Bird, financiada por el Museo Americano de Historia Natural, originalmente buscaba investigar el poblamiento temprano de la Patagonia, pero durante su estadía en Chiloé en 1936, recolectaron materiales y excavaron sitios, enviando todo a Nueva York. A diferencia de las colecciones de Magallanes e Isla Navarino, esta colección de Chiloé ha sido poco investigada debido al limitado desarrollo de la arqueología en la zona.
El profesor Sierralta explica en el medio digital de la UACh que “Esa exploración fue conducida por el arqueólogo neoyorquino Junius Bird. Junto con su mujer Margaret, pasaron dos años de luna de miel recorriendo e investigando en Patagonia occidental. La idea era probar la hipótesis de que el poblamiento inicial de Patagonia hubiera ocurrido a través de los archipiélagos. En parte gracias a ello hoy sabemos que no fue así. Entonces lo que hicieron fue llegar en tren a Puerto Montt, donde compraron una lancha chilota velera a la que adaptaron un motor de auto Ford. Zarparon desde isla Maillén, y navegaron hasta Punta Arenas excavando conchales y conociendo a los kawésqar”.
En relación a la permanencia de los Bird en Chiloé, el investigador indica que “Para no tener que ir y volver a Nueva York, que en esa época se hacía en barco, pasaron el invierno de 1936 en Chiloé, alojando en un hotel de la plaza de Castro. Recorrieron la isla, recolectaron materiales y excavaron algunos sitios, y todas esas piezas y documentos se fueron a Nueva York. Eso fue hace 90 años, y como la arqueología en Chiloé se ha desarrollado poco, esa colección no se investigó más, a diferencia de aquéllas que obtuvieron en Magallanes e Isla Navarino”. (Uach.cl. 28.02.2024)