“Las semillas tradicionales les pertenecen a los pueblos indígenas”
No sólo es la cacica presidenta de la comunidad diaguita Chipasse Ta Tatara en la comuna de Freirina, sino también la encargada de la Biodiversidad Alimentaria Alianza Nacional, una red que busca proteger el patrimonio más preciado de las comunidades indígenas y campesinas: el rescate de las semillas tradicionales.
¿De dónde nace el proyecto Biodiversidad Alimentaria Alianza Nacional en una búsqueda por proteger el patrimonio de las semillas tradicionales y la soberanía alimentaria?
El semillero de biodiversidad alimentaria está en Tatara Alto en la comuna de Freirina, donde tenemos el resguardo de aproximadamente mil semillas tradicionales que le pertenecen a los pueblos diaguitas, mapuche, aymara, y a los otros pueblos también han participado con sus semillas tradicionales. Este trabajo se inició en el 2011 en el Valle de Huasco con un equipo de profesionales y las comunidades diaguitas de la zona. Se empezó a hacer la parte de terreno, de buscar, de indagar, de hacer el rastreo de las semillas y conocer su historia, porque cada semilla tradicional tiene una historia, es la forma de corroborar que la semilla ha estado en el territorio por muchos años.
Ahí empezó todo este trabajo, esa es su génesis, empezando por la Provincia del Huasco, pero ahora se inició el trabajo como Alianza Nacional en la Araucanía, con las comunidades mapuche, donde ya se sacó un libro. Esta es una alianza que hay entre pueblos, el trabajo se hace en forma tradicional y se pone en valor la semilla.
En cuanto al patrimonio arqueológico precolombino, ¿en qué estado está y qué se necesita para resguardarlo?
Nosotros como diaguitas y la comunidad de Tatara tenemos sitios arqueológicos muy importantes que resguardar, tenemos patrimonio arqueológico en casi toda Provincia del Huasco, desde la cordillera al mar, muchos sitios que están en las quebradas, en la parte de la costa, cementerios, tambos. Están en serio riesgo por el avance, por la tecnología, por todo lo que vivimos en el día a día, por lo tanto, yo creo que el principal actor aquí debiera ser el Estado junto con los pueblos en sus diferentes territorios. Debiera haber alguna ley en la Ley de Monumentos Nacionales para el resguardo de los sitios arqueológicos que están en total abandono, como todos los sitios arqueológicos en el país. Por lo tanto hay mucho por hacer, por resguardar, como también la semilla ancestral, la semilla tradicional, la que tiene historia.
También la ley chilena es bastante débil en cuanto a lo que es resguardo de todo lo que es la soberanía alimentaria de nuestro país, por lo tanto las comunidades deben hacerse parte en los diferentes territorios, no tan solo acá en Huasco y hacer ese trabajo de rescatar todo lo que nos pertenece, todo lo que es el patrimonio alimentario, un patrimonio que debemos heredar a las nuevas generaciones. Hay que hacer la pega, hay que trabajar, ponerlo en valor, hacerlo visible que yo creo que eso es lo importa, que la gente conozca todo esto que tenemos.
¿Quiénes son aliados en esta defensa del patrimonio?, principales actores.
El principal actor somos nosotros y el Estado que debe hacer su parte, debe velar para que nuestro patrimonio cultural, material, espiritual sea resguardado.
¿Qué ha pasado con las semillas, porqué se han ido perdiendo?
Las semillas a través de la historia se han ido perdiendo, en algunos casos se han dejado de lado las semillas tradicionales. Las “semilleras” (empresas transnacionales) han ido sacando variedades de semillas que ellos prometen son una maravilla, como las que se venden en Bayer, en Monsanto y las diferentes semilleras, pero el tema es el siguiente: a través del tiempo los agricultores y los indígenas han tenido que depender de la compra de un paquete tecnológico; primero se les regalaba semillas a través de organizaciones, se le regalaba el paquete tecnológico y así muchos agricultores e indígenas fueron dejando de lado la semilla tradicionales, pensando que el rendimiento iba a ser mejor con la otra semilla que se les ofrecía.
¿Cuál es el rol de las mujeres en el resguardo de las semillas, como patrimonio ancestral de los pueblos indígenas?
El rol de la mujer en todo lo que tiene que ver con el resguardo, con el patrimonio, con la soberanía alimentaria, biodiversidad, familia, saberes, sabores, es demasiado importante. A lo largo de la historia se dice que las mujeres han estado presentes en toda la vida diaria de las comunidades indígenas; la mujer es la que preserva todos estos saberes y quehaceres. Creo que ha sido un papel fundamental de la mujer, no solo a través de las comunidades indígenas, sino a lo largo de la humanidad. La mujer es un pilar fundamental de la familia, nosotros trabajamos como familia. Así lo ha contado la historia, que el trabajo que hacen (las mujeres) en los campos, en la agricultura, en las minas, como pirquineras, hay agricultoras, hay las que pescan en la parte de la costa. Yo creo que ha sido un papel fundamental que ha preservado en el tiempo las semillas, que ha preservado las tradiciones, los quehaceres, lo saberes que hay en el campo. Son las mujeres las que guardan el testimonio de todo lo que se hace, así es que eso es por la parte de los diaguitas, tenemos mujeres que han hecho cosas muy importantes, como está Gabriela Mistral que fue una mujer diaguita, profesora, escritora y así, a lo largo de los tiempos hay mujeres que han dejado un baluarte en todo nuestro patrimonio.
Gabriela Pazos Periodista gabapazos@gmail.com